Ante unos diez mil espectadores, un cabezazo de Cristian Grabinski abrió el marcador a los 33 minutos del primer tiempo; mientras un formidable tiro libre de Edgardo Adinolfi lo cerró en el mismo epílogo, sobre el décimo minuto de descuento, adicionado por violentos incidentes entre las hinchadas.

Afortunadamente para el cuadro santafesino, en esta jornada también cayó Nueva Chicago. Pero, de haber vencido a Vélez Sarsfield, los de Mataderos hubieran provocado que Unión quede en Zona de Descenso.

Durante el primer tiempo se apreció cómo uno de los más habilidosos del fútbol argentino, Damián Manso, brilló en plenitud e hizo jugar a sus compañeros, en especial a Mauro Rosales, su mejor socio en la gestación de cada avance.

El "Piojo", que reapareció esta tarde tras superar la prolongada recuperación de una lesión en la rodilla, desequilibró en todo momento durante la primera mitad y se transformó en un problema insoluble para el conjunto local.

A su vez, Unión jugó decididamente mal, evidenciando su indiscutible irregularidad, pues decepciona tanto como deslumbra cuando hace una semana venció como visitante a La Academia.

Para colmo de sus males, recibió a un rival compacto, que le robó la pelota y la administró mejor, además de anular a los imprecisos Rubén Capria y Adrián González, sus generadores de buen fútbol.

Por ello, lució quebrado, el juego se desarrolló en varios pasajes en su campo y sufrió varios sobresaltos, además del gol de apertura: impecable cabezazo de Grabinski, luego de un córner ejecutado por el "Piojo" Manso.

En desventaja, los dirigidos por Oscar Craviotto abusaron del pelotazo, pero casi empatan a los 45 minutos, cuando Luciano Palos rechazó defectuosamente un envío aéreo, quedó desacomodado y el rebote -la mejor chance para el "Tate", hasta ese entonces-lo desperdició Christian Giménez, al rematar en forma desviada.

En el segundo período, Unión persistió en el ataque con la misma impotencia de la primera mitad, mientras Newell's se replegó e intentó esporádicos contraataques. Al minuto de la reanudación, Rosales estuvo a punto de estirar la ventaja cuando enfrentó -y perdió- en un mano a mano con Jorge Manduca.

Antes del primer cuarto de hora, el juego estuvo interrumpido unos diez minutos por agresiones entre las parcialidades, finalmente sofocadas por la activa intervención policial.

Después de aquella situación propicia para el cuadro rosarino en el amanecer del complemento, casi no se registraron más emociones frente a los arcos, salvo una media vuelta forzada de Pablo Islas, que justo derivó en las manos de Palos.

Y, si bien pudo igualar en esa ocasión, la victoria rojinegra resultó inobjetable, sin mayor amplitud por su falta de precisión en cada una de sus tibias réplicas, una buena puntería que si tuvo Adinolfi en el tiro libre del final.

SINESIS DEL PARTIDO:

UNIÓN: Jorge Manduca; Cristian Wernly, Fernando Ortiz, Julio Valli, Marcelo Mosset; Adrián González, Jorge Priotti, Cristian Ríos; Rubén Capria; Christian Giménez y Pablo Islas. Director técnico: Néstor Oscar Craviotto.

NEWELL´S: Luciano Palos; Luciano Vella, Cristian Grabinski, Leandro Fernández, Germán Ré; Pablo Villar, Sebastián Domínguez, Cristian Domizi; Damián Manso; Mauro Rosales y Walter Silvani. Director técnico: Héctor Veira.

GOLES: 33m Grabinski (N). Gol en el segundo tiempo: 45m Edgardo Adinolfi (N).

CAMBIOS: 8m Gastón Liendo por Villar (N), 10m Guillermo Marino por Manso (N), 22m Martín Perezlindo por Wernly (U) y Adinolfi por Fernández (N), y 44m Leonardo Torres por Valli (U).

ARBITRO: Juan Pablo Pompei.